Madrid - España, 12/11/2009 | "Ningún país respeta tanto a los arquitectos como España"  .- Se le ve contento más allá de las meras formalidades y es que el arquitecto Toyo Ito se encuentra muy a gusto en Madrid. «Cuando vine a España por primera vez en viaje profesional, es decir en 1992, soñaba con que algún día haría aquí mis obras». Hoy varios de sus proyectos más ambiciosos se desarrollan en nuestro país y el reconocimiento a su labor es tal que el Círculo de Bellas Artes le entregará hoy la Medalla de Oro de la institución y Casa Asia le dedica una amplia exposición de sus proyectos recientes. Además de fotografías y maquetas se proyectará un documental sobre Ito firmado por el fotógrafo Jordi Bernardó.

Toyo Ito nació en Seúl en 1941, durante la ocupación japonesa de Corea. En 1965 se graduó en Arquitectura por la Universidad de Tokio y empezó a trabajar para la firma Kiyonori Kikukate Architect and Associates. Seis años más tarde, en 1971, fundó su propio estudio en la misma ciudad, «Urbot» (Urban Robot). Tras varios años de trabajo, cambió el nombre del estudio por el de Toyo Ito & Associates Architetcs. A partir de los años ochenta Ito se convierte en un punto de referencia para los arquitectos de todo el mundo.

Trabajos más destacados

Algunos de sus trabajos más destacados son Silver Hut, la Torre de los Vientos o la Mediateca de Sendai. En España figura el nuevo parque de La Gavia de Madrid, en el ensanche de Vallecas, en construcción, el Parque de la Relajación en Torrevieja, y en Barcelona el proyecto FIRA 2000, cuyo objetivo es ampliar la Feria de Barcelona y el edificio Suites Avenue.

Ito, modesto como buen japonés, asegura no merecer tantos elogios y distinciones y afirma que España es diferente. «No hay ningún país que respete tanto a los arquitectos como España. A los españoles se les nota que les interesa la arquitectura y lo que expresamos los arquitectos. En Japón es más fácil construir nuestras obras. No sólo porque allí la ingeniería y la técnica están muy avanzadas, sino porque hay menos interés por lo que hacemos los arquitectos. Se nos presta menos atención que en España. Aquí estoy feliz porque me gusta que los arquitectos estén integrados en la sociedad».