Ubicada en una zona donde confluyen varios locales de exhibición de autos, el arquitecto José Orrego Herrera, busca marcar la diferencia en este nuevo proyecto. “Además de ser una tienda de automóviles, pretende mostrarse como una gran pantalla que sirva de marco a los diferentes modelos de la firma Braillard.”

Para destacar el conjunto, se creó un marco color gris claro que realce el plano azul corporativo de la empresa, y que además, sirviera de encuadre al espacio más importante de la fachada: la vitrina.

En el primer nivel se halla la sala de exhibición, que se eleva sobre la vereda, para lograr una mejor exposición de los modelos.

El proyecto consta de un showroom y un taller de mantenimiento de autos desarrollado en 4 niveles.

La construcción del taller, en la  zona superior, permitió contar con una gran fachada de 15 mts de altura, que se aprovechó para realzar el logotipo y nombre de la marca en acabados de acero.

El acceso al taller de mantenimiento se hace a través de rampas sucesivas, las mismas que se encuentran delimitadas por barandas de acero. Este elemento se vuelve fundamental no solo en cuanto a lo funcional, sino también en el diseño, puesto que se asocia mucho a la tecnología.

Los colores al interior del salón siguen siendo los mismos de la fachada, solo que en diferentes proporciones. El blanco esta vez genera continuidad, un espacio abierto y neutro donde los únicos protagonistas son los carros.

El piso también se asocia con el color de las paredes y el techo, cuidando siempre la línea cromática, que dirige la atención del observador únicamente hacia el objeto de compra.

“tuvimos mucha libertad para diseñar una imagen innovadora que permitiera que el local tuviera una presencia importante tanto de día como de noche”

El color azul, el acero y el vidrio son grandes colaboradores que permiten resaltar el recinto a cualquier hora del día.

Para realzar la tienda de noche, se propuso la aplicación de una trama en base a artefactos de luz fluorescente color azul. Estos fueron colocados sobre la vitrina, lo que brindó un efecto visual que destacara el conjunto sobre el frente.

Los autos se aprecian muy bien desde adentro por la luz blanca proveniente de artefactos de halogenuros metálicos.

Esta gran caja azul se ha convertido en un referente urbano dentro de un conjunto de locales que buscan solo exhibir marcas sobre la avenida.

DATOS:

Los materiales utilizados han sido fundamentalmente plancha de aluminio compuesto (Alucobond) y vidrio; en cuanto a los artefactos de iluminación, se emplearon fluorescentes de color azul de la firma Philips.

Cliente: representante de la Firma Braillard dedicado a la comercialización de autos.

Arquitectura: Arq. José Orrego Herrera - Metropolis

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