Es una extensión de la residencia Königswarte, presenta un revestimiento con listones horizontales de madera y fue terminado en noviembre el año pasado. Está localizado en una ladera escarpada en las dolomías italianas, este hotel se ha desarrollado, como entretejiendo un flujo libre, puesto en un índice y organizado; por una secuencia de tiras madera y de unidades de apartamento perpendiculares a él. Debido a que su forma total, fue desarrollada de acuerdo a pautas locales de planeamiento. La distribución linear de unidades y las vistas y direcciones al sol, es un resultado de las negociaciones constantes, entre todos estos parámetros; así como una respuesta consecuente a las tipologías pintorescas construidas con frecuencia en la zona. Desde la aplicación de la lógica topográfica, así como la indexación de de secciones horizontales como líneas continúas. Producen que el volumen, se forme como una serie de estratos, que como entidad artificial; mantenga un diálogo con su ambiente natural. Además estas secciones horizontales funcionan como líneas del control, permitiendo la generación de una geometría curvada. Las vendas de madera rodean el volumen en diversas escalas, fluyendo en el paisaje y resguardando los límites del edificio. Los balcones, se convierten en las zonas medias que intermedian el análisis razonado interno de los apartamentos, caracterizados por la eficacia espacial y la repetición de piezas funcionales del exterior, como una continuidad topográfica.